Después de más de dos meses de parón veraniego, el Campeonato de España de Rallies de Asfalto vuelve a ponerse en marcha con motivo de la celebración del más longevo de los rallies que hay en el calendario, el Rallye Princesa de Asturias, que celebra esta temporada su edición número 53. Tan solo quedan cuatro pruebas por disputarse, y si bien el campeonato no puede quedar matemáticamente sentenciado en esta prueba, si que podría tener un campeón virtual.
Pero de eso hablaremos más adelante, y es que, primero, vamos a dar un vistazo a la prueba que nos ha presentado el Automóvil Club Principado de Asturias para esta temporada. Encontramos una prueba muy similar a la de la pasada temporada, con algunas novedades en la segunda etapa. En total serán 194 kilómetros cronometrados, repartidos en 12 tramos en los que el nacional de asfalto podría quedar visto para sentencia.
La complicación podría llegar de la mano de la lluvia, que ya fue decisiva en la pasada edición, y que para esta temporada nuevamente aparece en las predicciones meteorológicas para la jornada del sábado. Y para comprobar lo delicado que puede ponerse el firme de los tramos asturianos cuando aparece la lluvia, nos subimos al Porsche 911 GT3 2010, con el que Miguel Fuster lograba la victoria la pasada temporada.
Un campeonato que puede quedar visto para sentencia
Con un total de cinco victorias esta temporada, y un séptimo puesto en Ferrol, debido a un pinchazo, Cristián García, piloto oficial de Mitsubishi, llega a esta sexta cita de la temporada con la tranquilidad del trabajo bien hecho. Las matemáticas nos dicen que el piloto aragonés no puede proclamarse campeón en esta primera cita asturiana de la temporada, pero si que podría ser virtual campeón en caso de conseguir subir al podio, aunque siempre dependería del resultado de Pedro Burgo. El principal inconveniente con el que podría encontrarse García en esta prueba es el hecho de salir detrás de los 22 participantes de la lista del European Rallye Trophy, lo que podría hacer que encontrase algo de suciedad en los tramos.
Pedro Burgo es el más firme candidato a arrebatarle el título a Cristián García. El piloto del ACSM Rallye Team volverá a montarse en el Porsche 911 GT3 2010, con el que ya ha conseguido dos podios esta temporada. Burgo necesita esperar a los errores de García para intentar luchar por el campeonato, unos errores que el piloto oficial de Mitsubishi rara vez ha cometido desde que compite en el nacional de asfalto. Además, Burgo deberá enfrentarse al mismo problema de García, saliendo en la lista nacional dentro de la prueba organizada por el ACPA, teniendo además el inconveniente de ser el único vehículo de tracción trasera que opta a la victoria de esta prueba, lo que podría ser un gran lastre en caso de aparecer la lluvia.
Otro piloto que aún cuenta con opciones matemáticas de hacerse con el título, es Sergio Vallejo, que llega a esta sexta prueba de la temporada con su Citroën DS3 R5 equipado con las últimas evoluciones desarrolladas por Citroën Racing. Son unas evoluciones que no han funcionado bien en un primer momento, pero el piloto de Meira asegura que estos problemas ya han sido resueltos. Los tramos en torno a Oviedo serán los encargados de juzgar, unos tramos en los que Vallejo será el primero en tomar la salida. Dejamos a un lado la polémica generada en los últimos días por los comentarios realizados por el piloto gallego en Redes Sociales sobre los reconocimientos ilegales, un problema que, a todas luces, debe resolver la Federación, y que, desde luego, daña la imagen de nuestro deporte.
Pero si hablamos de novedades en el Rallye Princesa de Asturias, no podemos dejar de hablar de Iván Ares. El piloto de Cambre anunciaba hace poco más de 10 días que participaría en esta prueba a los mandos del Skoda Fabia R5 del preparador gallego ARVidal, un modelo inédito hasta el momento en el nacional de asfalto, aunque ya pudimos ver a algunos pilotos del ERC con este vehículo en Gran Canaria. Ares ya ha podido probar el vehículo, y ha transmitido sensaciones muy positivas, marcándose la pelea por la victoria como su objetivo para esta cita, aunque el piloto gallego es realista, y sabe que un coche de este tipo necesita cierta adaptación, lo que podría complicarle este objetivo.
Otro de los pilotos que podrían luchar por los primeros puestos en esta cita, es Alberto Monarri. El piloto madrileño es uno de los habituales de esta prueba, que conoce a la perfección, y cuenta con una montura similar a la del líder del campeonato, por lo que queda clara su competitividad. Pero lo cierto es que la suerte no está acompañando a Monarri esta temporada. Problemas de juventud en su montura en el Sierra Morena, y un ligero toque en Ourense han apartado al piloto oficial de Mitsubishi de la lucha por la victoria. A pesar de todo, los dos segundos puestos conseguidos en Ferrol y Cantabria, abren la puerta a la esperanza, para un piloto que quiere demostrar de lo que es capaz en cada prueba.
Otra de las novedades que encontraremos en esta sexta cita de la temporada, es el retorno al campeonato de Luís Monzón, que se subirá en uno de los Ford Fiesta R5 de RMC Motorsport, con la colaboración de Auto-Laca. Monzón se marca la lucha por los primeros puestos como objetivo, aunque sabe que la falta de ritmo de competición puede ser su principal lastre. El piloto canario ha participado en el Príncipe en un total de 9 ocasiones (nunca ha participado con su nueva denominación), contando en su palmares con 6 podios, de los cuales 3 son subiendo a lo más alto. Como curiosidad, cabe reseñar que de esas 3 victorias, Monzón ha conseguido dos a los mandos de vehículos de la categoría WRC, una en 2001 con el Peugeot 206 WRC, y otra en 2013 con el Mini WRC, que le servía para proclamarse Campeón. La primera victoria de Monzón en esta prueba se producía en 1995, a los mandos de un Ford Escort Cosworth, en la que fue su única prueba en la Península de aquel año.
Siguiendo con las novedades, no podemos pasar por alto la presencia de José Manuel Mora con un Ford Fiesta R5, también de RMC Motorsport. La unidad que utilizará el bravo piloto asturiano es la misma con la que ha venido participando hasta ahora Jonathan Pérez, uno de los grandes ausentes de esta cita. Mora se quita toda la presión de encima, hablando de falta de kilómetros con el R5, aunque todos tenemos aún en la retina los buenos cronos que marcó la pasada temporada cuando apenas acababa de subirse en el R2. Tampoco debemos olvidar el hecho de que esta será la primera prueba del piloto asturiano con un vehículo de tracción total moderno. Hasta ahora, tan solo ha participado a los mandos de un 4×4 en el Rallye de Asturias Histórico, en el que se subía a los mandos del Ford Sierra Cosworth 4×4 del equipo PAST Racing.
Por supuesto, también veremos a otros habituales del nacional en esta 53ª edición del Rallye Princesa de Asturias, como Iago Caamaño, con su habitual Ford Fiesta R5, o Daniel Marbán, a los mandos de su Lotus Exige. Volveremos a tener en la salida el Swift R+ oficial de Suzuki, con Gorka Antxustegi a los mandos, después de que el propio Amador Vidal, desarrollador del vehículo, lo probase en El Bierzo. También veremos a algunos de los pilotos del regional asturiano, como Óscar Palacio, que estrena decoración en su Mitsubishi Lancer EVO X, o Alberto Ordóñez, que se subirá al Volkswagen Polo N1 de ARVidal.
Adrián Díaz en busca del título
En el apartado de Dos Ruedas Motrices, nos encontramos con un Adrián Díaz que, en caso de conseguir la victoria, se proclamaría automáticamente Campeón, hiciesen lo que hiciesen sus rivales. En realidad, también le valdría ser segundo, siempre y cuando Esteban Vallín fuese tercero, y es que, no debemos olvidar que para este apartado, se descuentan dos resultados, en lugar de uno, como ocurre con el título absoluto. Esto hace que si Díaz consigue la victoria sume 250 puntos, una cifra inalcanzable para Vallín, que tendría que descontar los resultados de Gran Canaria y Adeje, lo que haría que el piloto oficial de Opel solo pudiese sumar 247, consiguiendo el segundo puesto en el Princesa de Asturias, y la victoria en las tres pruebas restantes.
Esto no debería ser un problema para Adrián Díaz, que cuenta sus participaciones por victorias desde la llegada del campeonato a la Península, aunque, obviamente, no se puede vender la piel del oso antes de cazarlo, ya que recordamos la debacle del equipo oficial Suzuki la pasada temporada en esta prueba, en la que Gorka Antxustegi sufría una salida de pista, viéndose obligado a abandonar.
Si nos ceñimos a los vehículos de la categoría R2, aquí las cosas pintan mucho mejor para Opel, que tiene a Esteban Vallín como líder, seguido de su compañero en el equipo oficial, Ángel Paniceres. Aquí, las cuentas son algo más complicadas. Un doblete del equipo oficial, con Vallín consiguiendo la victoria, y Paniceres el segundo puesto, aseguraría el título para uno de los dos pilotos del equipo, dejando fuera de la ecuación a Roberto Blach, que aunque lograse ser tercero, ya solo podría optar al subcampeonato. Este resultado se ha conseguido en dos ocasiones esta temporada, Córdoba y Cantabria, y, además, en esta cita la lucha será más fuerte, con la llegada de pilotos como José Luís Peláez o Javier Pardo con sendos Peugeot 208 R2.
En cuanto a la categoría R3, Surhayen Pernía llega como líder, pero no puede proclamarse Campeón de ninguna forma. Sabemos que el piloto cántabro está centrado en su participación en el Trofeo Clio R3T Ibería, y buena prueba de ello son sus participaciones con un Ford Fiesta R5 en Cantabria, y presumiblemente en Llanes, pero a nadie le amarga un dulce, y estamos seguros de que el piloto cántabro buscará sumar este título a su palmares. Pero Fran Cima juega esta vez en casa, y no se lo pondrá nada fácil, contando para esta ocasión con David Nafría, y Aloísio José Lemos, como invitados, al menos en la categoría R3, también a los mandos de vehículos de la marca del rombo. Tampoco podemos olvidarnos de Emma Falcón, que marcha segunda de la categoría a los mandos del Citroën DS3 R3T, gracias a su gran regularidad, y a que ha sabido aprovechar a la perfección las ausencias de sus rivales.
Copa Suzuki Swift
Efren Llarena llega a esta quinta cita de la Copa Suzuki Swift como líder, después de haber conseguido 3 victorias en lo que llevamos de temporada. A pesar de todo, Llarena no puede aún relajarse, puesto que a solo 11 puntos, Fernando Rico viene pisando fuerte. Tampoco podemos aún descartar a José Mañá, que ha sido segundo en las dos últimas citas, y buscará en Asturias su primera victoria de la temporada. Por último, será interesante ver las evoluciones en esta prueba del piloto local, Alfredo Tamés, que ha ido cogiendo ritmo poco a poco en la monomarca nipona, y llega a la prueba de casa con ganas de demostrar de lo que es capaz.
Grupo A Legend Rallye
Otro de los grandes atractivos de esta 53ª edición del Rallye Princesa de Asturias será la disputa de la cuarta edición del Grupo A Legend Rallye. Será la segunda ocasión que se dispute junto a esta cita con base en Oviedo, y, como en la anterior edición, los pilotos de esta prueba tan solo tomarán parte en los tramos del sábado. Lo de menos en este caso es el resultado, aunque como en toda buena competición automovilística, el cronometro será quien decida el ganador. Pero en este caso, lo más importante será poder volver a ver autenticas leyendas de los tramos, de nuevo participando en una prueba. Destacamos la participación del mexicano Ricardo Triviño, con su Peugeot 206 WRC, Antonio Villar con un Ford Escort WRC, y Albert Orriols con un Subaru Impreza WRC. También veremos dos Seat Ibiza Kit Car, un Peugeot 306 Maxi, dos Ford Escort Cosworth Grupo A, un Mitsubishi Lancer EVO III también de Grupo A, varios BMW M3, Ford Sierra Cosworth, y en el apartado de los Grupo B, poco numeroso, un Renault 5 Turbo 2, y un Opel Manta 400. Desde luego, auténticas joyas que harán las delicias de todos los aficionados.
Termino el previo, como siempre, pidiendo precaución a todos los que os desplacéis para disfrutar de esta 53ª edición del Rallye Princesa de Asturias. Situaros siempre en lugares seguros, y seguid las indicaciones de los comisarios de la prueba, las fuerzas de seguridad, y la caravana de seguridad del rallye. Además, debemos procurar dejar siempre la zona donde disfrutemos de los tramos limpia, para que otras personas puedan disfrutar de ella una vez haya terminado la competición, y evitar las molestias a los vecinos. Por último, insisto una vez más en la necesidad de planificar correctamente los desplazamientos de un tramo a otro, para evitar las prisas. También quiero recordar que es importante no bloquear los accesos a los tramos, para permitir que otros aficionados puedan desplazarse cuando lo deseen, pero sobretodo, facilitar el acceso y la salida de vehículos de seguridad en caso de que sea necesario. Nos vemos en las cunetas.
